lunes, 13 de agosto de 2012

Palabra de Gala.

               Tantas vueltas como le he dado al tarro para intentar describir la realidad que nos rodea sin caer en frases hechas y sin utilizar manidos adjetivos que de tanto usarlos se han desgastado en significado... y ahí me tienen al célebérrimo escritor Antonio Gala. No tengo nada más que añadir:


martes, 7 de agosto de 2012

"Todo fluye...

...nada permanece", diría el filósofo heleno Heráclito de Éfeso. Y es que es una auténtica delicia levantarse, entrar en youtube, ver un video del traslado de la Patrona de mi pueblo y leer la descripción de su autor. Acostumbrados los cofrades a lacrimógenos pregones, desmedidas loas, ripiosidades varias, topicazos de ayer y hoy, etc, provenientes de webs, blogs y demás... me ha supuesto un soplo de aire fresco de mañana agosteña leer un punto de vista, una forma de ver las cosas que, cada vez más, va encajando con las mías propias. Nuestras tradiciones son, por naturaleza, efímeras; como todo lo que sale de la mano del hombre. Quizás sea eso lo que las hace atrayentes.

               Pero me van a permitir traer aquí a otro filósofo griego: Parménides. Y es que el ser humano tiende a crear iconos que trascienden su propia existencia e insuflarlos de una perennidad que él mismo no posee. Desde pequeñitos nos dejamos impresionar por cosas, hechos y momentos que nos acompañan siempre y siempre esperamos como el azahar en marzo o el humo de suspirón en noviembre. Y, a qué negarlo, nos causa algo de desazón no encontrarlo con el mismo esplendor con que lo conocimos.

               No es el caso que hoy traigo: el altar de Novena de Ntra. Sra. de los Remedios. Ahí sigue, esplendoroso, absoluto, impertérrito a todo, como si con él no fuera tantos y tantos asuntos (menos mal), volviéndome a dar impresión, como cuando era pequeño (y eso que me llevé más de doce años montándolo). Ayer pude sacarle esta foto, con el permiso de quienes le estaban dando sus últimas pinceladas. Aún tenía las velas apagadas y la única luz era la que le entraba por el rosetón de la fachada de poniente.




domingo, 5 de agosto de 2012

Dos años en la red.

               Hay quien te leerá con intenciones perversas, fue lo primero que pensé hace dos años cuando pasó por mi mente hacer un blog. Al final el empujón necesario me lo dio un amigo trianero, cuyas manos están bendecidas de tocar a la Esperanza. "Arte un bló, miarma", me dijo con ese salero propio de alguien criado en la trianera calle Pureza, frente por frente mismo de donde habita su Reina. Y así titulé mi primera entrada.

               A qué negarlo, tuve mis temores a la hora de emprender este camino. Villarrasa e Internet fueron dos términos que al principio no casaron demasiado bien. Sólo era poner en el buscador el nombre de mi bendito pueblo y saltar sapos y culebras desde los más variopintos foros o páginas de quejas donde cualquiera podía, anónima e impunemente, soltar su bilis y vomitar el odio que a la cara no eran capaces. Al respecto me cabe el "honor" de haber sido una de las primeras víctimas, de esto hace ya diez años. Con el tiempo y una caña pude averiguar quién fue, cosa que hizo abstenerme de actuar y reafirmarme en uno de mis principios: Si alguna vez voy de safari será para cazar leones, no ratas. Hay esfuerzos que no compensan.

              Le he dado un pequeño lavado de cara (renovarse o morir, como quien dice) A partir de ahora quizás no prime tanto la cantidad de entradas... quizás, no lo sé. Puede que ahora no me muerda tanto la lengua o quizás sí... no lo sé. Puede que ahora lo políticamente correcto haya buscado un buen aparcamiento... puede que no, no lo sé. Entre mis haberes en la vida no contemplo la necesidad imperiosa de caerle bien a todo el mundo y mucho menos caer en gracia para ser aceptado en ningún grupo. Mucho menos me voy a disculpar por tener una determinada forma de pensar. Eso sí, lo valiente no quita lo cortés y el respeto siempre irá por delante... sólo pido que quienes accedan a hacer algún comentario en alguna de mis entradas, empleen la palabra y el argumento para rebatir alguna tesis que aqui se exponga. El insulto y la descalificación no son más que síntomas de falta de razón.

               No busquen en este espacio más que eso: Lo que soy, lo que pienso, lo que siento y lo que sé.... y un último consejo: no lean más de lo que está escrito.